martes, 30 de julio de 2013

Paseo


Entrando por el vestíbulo, a mano derecha, existe un camino que lleva a uno de los mayores centros sociales de la Prepa. Es el camino de los sueños, las esperanzas y los juegos.
     Al transitar por ahí, se deja el cargamento de presiones, como si cada paso fuera un puerto receptor de consternaciones, pesares desechados por los marineros de la sonrisa.
     Pareciera que este es un paseo a las nubes, porque de regreso a las aulas, nos convertimos en seres que ya no caminan, sino flotan  sintiéndose triunfantes para vencer cualquier  adversidad.
     En efecto, me refiero al camino que lleva a la cafetería: punto de convivio de compañeros y, sobre todo, de anécdotas divertidas que quedarán grabadas en el corazón de ese lugar. Tal vez este pasaje no es muy bonito, ni siquiera panorámico, pero lo que guarda en cada paso que damos es mucho más bello que cualquier jazmín en primavera y tan duradero como la misma eternidad.

                                                                                                                            Aranza Salavarrieta

                                                                                                                            Grupo 507